Ruta por los castillos de Ávila (Parte 2)
Ávila atesora majestuosas y colosales edificaciones, fortalezas que derrochan historia, estilos y sobre todo, mucha cultura. En un artículo anterior os hablábamos del Castillo de Valdecorneja, el Castillo de Arévalo y el Castillo de la Adrada. Si todavía no lo has leído, puedes hacerlo aquí
Castillo del Condestable Dávalos o Castillo de la Triste Condesa
Esta fortificación, a diferencia del resto de Castillos de Ávila, se encuentra en una de las partes más bajas del municipio Arenas de San Pedro, junto al río. Esto puede deberse a que no se construyó pensando en una fortaleza defensiva, sino que era la manera que tuvo el Condestable Ruy López Dávalos de enseñarle a la población su dominio sobre el territorio.
Fue construido en el siglo XV, ofrece un maravillosos paraje natural gracias a la Sierra de Gredos.
Años atrás, se planteó la posibilidad de convertir este castillo en Parador de Turismo, pero finalmente la propuesta no llegó a nada. No obstante, el Castillo de la Triste Condesa se ha usado como espacio cultural para distintos eventos.
Declarado Bien de Interés Cultural en el año 1931 además, también ha sido escenario de festivales y conciertos.
Castillo-Palacio de Magalia
El Castillo Palacio Magalia se encuentra ubicado en la parte más alta del municipio de Las Navas del Marqués. Aunque la construcción del castillo data del siglo XVI, sus estructuras defensivas y de sus Torre del Homenaje se construyeron durante el siglo XIII, que se alzaron como defensa durante la Reconquista.
El patio interior formado por dos plantas llenas de columnas, es una de las estancias más hermosas del Castillo Magalia. Actualmente, esta fortificación se usa para diferentes congresos y eventos culturales, ya que de su gestión se encarga el Ministerio de Educación y Cultura.
El palacio cuenta 41 habitaciones e incluso una piscina climatizada y es uno de los pocos castillos rocosos que se conservan en perfecto estado en la actualidad.
Castillo de Castronuevo
Con poco más de 65 habitantes, el pueblo Rivilla de Barajas acoge uno de los Castillos de Ávila que no deber dejar de visitar si viajas a la provincia de Ávila. El origen del nombre proviene de un antiguo poblando de este municipio que quedó abandonado.
El castillo data de finales del siglo XV y perteneció originariamente a la Casa de Alba, familia con mucha historia en Ávila.
Rodeado por una pequeña muralla a modo de barbacana y de un foso, el Castillo de Castronuevo, también conocido como Castillo de Rivilla de Barajas, consta además de tres torres de planta circular y dos rectangulares. Esta edificación se construyó principalmente con ladrillos, sillería y mampostería.
En cuanto a las visitas, se trata de una propiedad privada, pero que abre al público todos los fines de semana.
